Los canales en forma de bucle en el oído interno contienen líquido y sensores finos y similares a vellos que te ayudan a mantener el equilibrio. En la base de los canales se encuentran el utrículo y el sáculo, los cuales contienen un parche de células ciliadas sensoriales cada uno. Dentro de estas células se encuentran partículas diminutas (otoconia) que ayudan a controlar la posición de la cabeza con respecto a la gravedad y el movimiento lineal, como por ejemplo al subir y bajar en un ascensor o al ir hacia delante y hacia atrás en un auto.